LA GASOLINA EN LOS TIEMPOS DE LAS CAVERNAS

Ayer gritaban “CON HAMBRE Y SIN EMPLEO, CON CHAVEZ Y MADURO ME RESTEO”; hoy, Chávez se murió y en el infierno está, y Maduro los dejó con empleo por el que perciben un sueldo que no da ni para un almuerzo y con mucha hambre. Los felicito, lo que pidieron se los dieron pendejos; eso va en especial con los falsos luchadores de SIDOR, quienes son corresponsables del debacle de la empresa para la que trabajan, y ahora lloriquean por sus sueldos de miseria.

Hablando de ayer, un ayer que nadie quiere recordar, pues como que les ofende, en los tiempos de la social-democracia venezolana, esa que la Conspiración de los Náufragos enterró (excelente libro), en esa Venezuela, tu podías ir a la hora que te diera la gana de viaje, sin necesidad de permisos o chips de gasolina, desde Maracaibo hasta Tucupita, en carro. Había Estaciones de Servicio las 24 horas, con baños, agua potable (potable de verdad) y comida, y Bolívares para pagarlo.

Tenías puntos de control de la GN (Guardia Nacional) en muchas partes del País, pero no eran 20 cada 100 Km. Desde Maracaibo hasta Barquisimeto (+/- 300 Km) había si mal no recuerdo 3 puntos de control de la GN; Puente Sobre el Lago, El Venado y a la entrada de Barquisimeto; uno que otro punto de control de la Policía, y uno que otro punto de control de los temibles Fiscales de Transito, matraqueros de oficio (pero estos solo trabajaban en horario de oficina).

Ante tu estupor, sí, se podía viajar de noche y sin problemas. Claro, tenías que llevar efectivo, pues en las Estaciones de Servicio no se aceptaban cheques o tarjetas de crédito… pero no era un problema obtener efectivo.

De esa Venezuela que estoy hablando, es de la Venezuela en la que me hice adulto, en la que se podía comprar casa, carro, casarse, con tu sueldo. Lo de la casa era complicado, pero se podía.

Esa es la Venezuela que los cretinos chavistas destruyeron, y que después de destruirla han huido. Algunos pocos (muy pocos) hinchados de dinero robado, la mayoría a pie.

En esa Venezuela de las “cavernas” no se hacía cola para comprar gasolina ni gas. La bombona de gas te la llevaban a tu casa, con una simple llamada desde el Teléfono de la CANTV privatizada, que llevó el nivel de telefonía de Venezuela al estándar internacional.

Claro, con tanta basura que divulgan los medios, nadie se acuerda de esa Venezuela.

¡En Dios Confío!

Alexander Acosta Guerra

Activista político venezolano en el exilio

Barranquilla, viernes 16 de junio de 2023