ALGUNAS VERDADES

En Venezuela no podemos ni podremos hablar de rectificación mientras gobierne la revolución, pues en esencia quienes la dirigen están en el proceso de instalar un régimen totalitario disfrazado de pseudo-democracia electorera.

Pedir que quienes nos han traído hasta este terrible momento en Venezuela sean quienes nos saquen, quienes construyan las bases de un sendero de progreso, es como pedirle al mismo demonio (que es su jefe) que tenga piedad de un buen cristiano.

El extremismo no tolera la disidencia o las diferencias, su único objetivo es doblegar al adversario advenido en enemigo, por tanto y en cuanto piensa y actúa diferente. No hay acuerdo posible con regímenes totalitarios dirigidos por extremistas trasnochados que creen solo en la fuerza y en el miedo como forma de ejercicio político.

Si los alemanes hubieran recibido a patadas a los Camisas Pardas, Hitler no hubiese llegado nunca a la Cancillería del Reich.

Hay algunos que se sienten muy cómodos ocupando algunos espacios en la competencia para llegar a ser los representes “eternos” del primer partido de oposición. Esos mismos que miraron a un lado mientras a nuestros muchachos los perseguían, encarcelaban o mataban durante las protestas del año pasado. Esos mismos que viendo al régimen “boquear” de cansancio ante la pérdida drástica y evidente de legitimidad como consecuencia de la brutal respuesta ante las protestas, aceptaron reunirse con sus funcionarios, sin pedir condiciones. Esos mismos que dicen “estamos blindados” hasta las 10pm del día de las elecciones.

El Estado Totalitario busca el control de TODO a través de la FUERZA y del MIEDO. Y TODO es TODO, lo que comes, lo que vistes, lo que calzas, lo que lees, lo que compras, a donde viajas, con quien te reúnes, con quien hablas, de que hablas, lo que piensas, lo que sientes (siempre miedo), lo que sueñas, lo que aspiras… TODO.

Al MAL solo se le puede combatir. Con el MAL no se puede negociar, pues no reconoce acuerdos, tratados, palabras o firmas, solo se reconoce a sí mismo y a la necesidad de someter a los demás, por la fuerza o por el miedo.

La PROPAGANDA como medio de supresión de la realidad es una forma de expresión del TOTALITARISMO que ya ha tenido éxito en otros tiempos y otros lugares. A la PROPAGANDA TOTALITARIA solo se le puede combatir con la VERDAD; lo complejo es que quienes combatan con la VERDAD como bandera,  deben ser creyentes y ejemplos de esa VERDAD entendiendo cada espacio posible y cada limitación presente.

El 6 de diciembre de 2015 conviene más al régimen que a nosotros mismos; yo no esperaría suspensiones electorales, esperaría eso sí, más abusos en todos los espacios y a todos los niveles… pues cada abuso cometido, sin una respuesta seria que lo rebata, es “alimento para el miedo que se siembra en las conciencias de los ciudadanos de bien”.

Alexander Acosta Guerra

26 de agosto de 2015